Un gran día llegó, 5 de mayo
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| Sala donde fueron celebrados los Estados Generales |
Los preparativos habían sido hechos: los delegados se habían elegido, los cahiers de doléances habían sido redactados; sólo faltaba el gran día. El descontento popular se vio muy presente desde ese martes 5 de mayo. Algunos diputados fueron apedreados, la plebe no simpatizaba con los representantes del primer y segundo Estado.
Al Tercer Estado desde el inicio de la reunión se le recordó su inferioridad, fue obligado a entrar por las puertas laterales y a vestir de negro, mientras los otros Estados y el Rey lucían sus privilegios. Un susceptible Tercer Estado exigía la deliberación conjunta, sino todas las decisiones se verían aplacadas por los dos primeros Estados. Los burgueses se negaban a deliberar hasta que ver cumplida su demanda, los nobles y clérigos notaron el peligro y se opusieron mientras algunos párrocos simpatizaban con los plebeyos. El tema estuvo en discusión en la Asamblea durante cinco semanas sin logro alguno.
Fue así cómo el 10 de junio el Tercer Estado invitó a una verificación conjunta de poderes, cómo sus invitados no asistieron lo hicieron con ellos. Así el 17 de junio, acompañados de unos cuántos párrocos, se proclamaron Asamblea Nacional.
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Al Tercer Estado desde el inicio de la reunión se le recordó su inferioridad, fue obligado a entrar por las puertas laterales y a vestir de negro, mientras los otros Estados y el Rey lucían sus privilegios. Un susceptible Tercer Estado exigía la deliberación conjunta, sino todas las decisiones se verían aplacadas por los dos primeros Estados. Los burgueses se negaban a deliberar hasta que ver cumplida su demanda, los nobles y clérigos notaron el peligro y se opusieron mientras algunos párrocos simpatizaban con los plebeyos. El tema estuvo en discusión en la Asamblea durante cinco semanas sin logro alguno.
Fue así cómo el 10 de junio el Tercer Estado invitó a una verificación conjunta de poderes, cómo sus invitados no asistieron lo hicieron con ellos. Así el 17 de junio, acompañados de unos cuántos párrocos, se proclamaron Asamblea Nacional.
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